Excelencia, innovación y sustentabilidad han marcado la historia de Viña Concha y Toro. Hoy, tras un exitoso periodo de transformación, la compañía ha sentado las bases para continuar con su crecimiento futuro.

Viña Concha y Toro cumple 140 años de vida este 2023, con una oportunidad para renovar su compromiso con la premiumización de su portfolio, así como también con la innovación que la caracteriza y que inspira día a día a los equipos a desempeñarse con pasión y excelencia para producir marcas que acompañen experiencias memorables para los consumidores alrededor del mundo.

Tras 140 años, Viña Concha y Toro se ubica entre las principales productares de vino en el mundo gracias las marcas del origen Chile -como Casillero del Diablo, Marques de Casa Concha y Don Melchor- que han conquistado a millones de consumidores por su gran calidad y mantienen una posición de liderazgo indiscutido en la competitiva industria del vino. También destacan la irrupción de nuevas marcas como Diablo, Marques de Casa Concha Heritage, Unrated y Gran Reserva. Del origen en Argentina, destaca Trivento Malbec, con su indiscutido protagonismo entre sus pares, mientras que de California, la marca Bonterra es líder en el mercado orgánico.

En 2022, las marcas de los tres orígenes tuvieron 188 reconocimientos sobre 90 puntos en los medios especializados más destacados a nivel mundial. Adicionalmente, la publicación International Wine Intelligence eligió nuevamente a Casillero del Diablo como la segunda Marca de Vino Más Poderosa del Mundo, listado en el que también figura Frontera, otra marca relevante para la compañía.

Nuevos lanzamientos

Este aniversario es también una oportunidad para mirar el futuro de la compañía de la mano de nuevos lanzamientos innovadores y alineados a las tendencias globales.

Un lanzamiento destacable es Diablo y sus extensiones de línea, que con pocos años en el mercado ya se posiciona como una de las marcas más vendidas de la compañía. A él se suma Unrated, una propuesta disruptiva que ha logrado posicionarse como el principal Cabernet Sauvignon chileno en Estados Unidos en la categoría.

Siguiendo con lanzamientos focalizados en las preferencias de nuestros consumidores, Concha y Toro presentó con gran éxito Casillero del Diablo Belight, una propuesta baja en calorías y graduación alcohólica en sus variedades Sauvignon Blanc y Rosé.

Otra novedad de este año es que con el objetivo de ser un actor relevante en el segmento de vinos de lujo, Viña Concha y Toro creó una nueva área comercial dedicada exclusivamente a las marcas de alta gama: Luxury Brands Division. El área tiene el objetivo de desarrollar las marcas seleccionadas de vino de lujo, con alcance mundial, pero con foco especial en algunos mercados claves, como por ejemplo Asia, Estados Unidos y Brasil.

Foco Sustentable e Innovación

Con una mirada de futuro, en la segunda década del siglo XXI, el holding incorpora la Sustentabilidad e Innovación como pilares fundamentales para la trascendencia de la empresa. La ambiciosa agenda de sustentabilidad iniciada hace algo más de una década apunta a alcanzar prácticas regenerativas con el objetivo de tener un impacto positivo, es decir, devolver a la tierra y la comunidad más de lo que nos ha dado, alineada con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) (3).

Desde 2015, Viña Concha y Toro forma parte del Dow Jones Sustainability Index y desde 2021 de la comunidad global de Empresas B.

Algunos logros en materia de Sustentabilidad son la reducción de 50% de la huella de carbono en 10 años en nuestra operación en Chile, el resguardo de más de 4.200 hectáreas de bosque nativo propio y haber logrado abastecerse completamente de energía eléctrica renovable en nuestras operaciones tanto en Chile, Argentina y Estados Unidos.

Asimismo, hace nueve años creamos el Centro de Investigación e Innovación con el objetivo de incorporar la innovación a los procesos tradicionales de la elaboración del vino, así como también ser un aporte a la industria vitivinícola nacional. El fin es Innovar para Trascender. Ya se están viendo frutos interesantes, como diversas técnicas que permiten ahorro de 18% de agua para riego y el desarrollo de “plantas 2.0” libres de 11 enfermedades y virus que afectan a la vid, permitiéndoles ser más longevas y estar más preparadas para el cambio climático.